(Un resumen de este artículo dividido en tres partes fue publicado en L’Econòmic del 10.04.2022)
En relación al pasado hay refranes para todos los gustos: ‘Cualquier parecido con el pasado es mera coincidencia’, dice uno, aunque haya otro que lo contradiga: ‘El futuro no es más que el pasado que regresa’. En cualquier caso pienso que es positivo echar la vista atrás aunque solo sea por no repetir un pasado que puede no ser agradable, tal y como enunció el filósofo George de Santayana: ‘Los que no pueden recordar el pasado están condenados a repetirlo’.
En 1997, el entonces presidente del Gobierno José María Aznar pronunció la frase que hoy es un clásico: “España va bien”. Nueve años después, José Luís Rodríguez Zapatero dio una vuelta a la frase: “España va más que bien”. Desde 1986 la construcción de había convertido en uno de los principales motores de crecimiento de la economía española, lo que se incrementó desde mediados de los 90 cuando el crédito de bancos y cajas de ahorro alimentó sin techo el endeudamiento privado.
Llega el 2007 y la sensación de euforia en España era total. El presidente del Gobierno pronuncia la frase “España país de éxito y manifiesta que “En 2010 vamos a superar ligeramente a Alemania en renta per cápita; les vamos a coger”. En Septiembre empiezan a manifestarse los primeros síntomas de ‘desaceleración’ económica, sin embargo el presidente del Gobierno lanza la que posiblemente haya sido la frase más recordada del período: “La economía española juega en la Champions League de las economías mundiales”.
Tras la quiebra de Lehman el mensaje: el presidente del Gobierno anuncia: “Vamos a pasar unos meses de dificultades (…) sabremos hacer recuperar la economía”. A pesar del evidente deterioro en que la Economía española había entrado desde el 2008, la primera vez que el entonces Ministro de Economía usó la palabra ‘crisis’ pare referirse a la situación económica y social existente en España fue en una entrevista publicada en el periódico El País el 18 de Enero del 2009 en la que admitía: «Hemos utilizado todo el margen que teníamos contra la crisis».
A partir del 2008 se entra en una serie de previsiones realizadas o asumidas, pero desde luego publicitadas por el Gobierno, que han acompañado todas las fases de este período de crisis en el que nos hallamos inmersos. Catorce años desde el inicio de la crisis, ¿se han acercado esas previsiones gubernamentales a lo que ha sido la realidad?. Durante varios días iremos viendo que ha ido diciendo el Gobierno de turno y qué ha ido sucediendo en nuestra vida real; y lo haremos en relación al PIB, al saldo de las cuentas públicas, a la deuda pública y a la tasa de desempleo del factor trabajo.
Las conclusiones las extraerán Uds. La exposición de los hechos está ahí. Comenzaremos con el período 2007 – 2012.
Producto Interior Bruto
(a) Tomada para elaborar los presupuestos del 2008. (b) ‘Por debajo del 2% este año y menos en 2009’ (Pedro Solbes en declaraciones en RTVE). (c) Leheman Brothers. (d) Tomada para elaborar los presupuestos del 2009. (e) Plan de Austeridad 2010 – 2013.(f) Tomada para elaborar los presupuestos del 2013.
El año 2007 cerró con un crecimiento del 3,7% en línea con el de años anteriores (2006: 3,9%, 2005: 3,6%, 2004: 3,3%) y no llegaron las tensiones que ya eran evidentes en países como Irlanda. Por ello no sorprenden las previsiones que el Gobierno realizó en el trimestre final del 2007 para los años 2008 o 2009. A medida que el 2008 fue avanzando ya se fue viendo que las cosas no iban bien. Las previsiones van empeorando aunque el Gobierno cree que será de forma temporal y que remontarán a partir del 2010. (Como curiosidad la previsión para la economía española realizada por Lehman Brothers en Julio dos meses antes de producirse su quiebra).
El año 2008 acaba con un crecimiento del 0,9% lo que muestra una caída espectacular respecto a años anteriores y a las previsiones realizadas, caída que el propio Gobierno asume y que se ve reflejada en los avances que elabora en el año 2009. La última, la de Octubre, casi coincide con el crecimiento habido en el año: el -3,7%.
El 2010 fue una ilusión: ‘los brotes verdes’, ¿recuerdan?. El cierre del año fue mejor de lo que el ejecutivo había previsto, y este continuaba pensando que la recuperación se hallaba a la vuelta de la esquina, pero el crecimiento del 2011 empeoró todas las previsiones y el del 2012 se acercó al supuesto del escario adverso.
En esta primera fase cabe afirmar que las previsiones del Gobierno fueros siempre por detrás de la realidad y que estuvieron muy alejadas de la realidad. Algo que puede hacerse extensivo a las previsiones sobre el saldo a alcanzar por las cuentas públicas.
Saldo cuentas públicas en porcentaje del PIB. (Signo positivo superávit. Signo negativo déficit)
A destacar el paso de un superávit sobre PIB del 2,2% en el año 2007 a un déficit del -10,4% en el 2012. (El camino de las cuentas públicas fue lento en la mejora y fulgurante en la caída. En 1995, cuando España empezó a ir bien, el déficit fue del -6,47% y hasta el 2004 el saldo fue negativo: -0,34%. Tres años en superávit –dejando a un lado las carencias en gasto público– y luego …).
El reflejo en la evolución del déficit se halle en la evolución de la deuda pública.
Deuda pública (En porcentaje el PIB)
En el año 2000 la deuda privada ascendía al 105% del PIB; en el 2001, el momento en el que el boom del ladrillo empieza a manifestarse con toda su potencia alcanza el 116%; en el 2007, el año en el que empieza nuestra historia llega al 215% del PIB.
Por el contrario la deuda pública había estado descendiendo ininterrumpidamente desde 1996: 65,4% hasta ese 35,5% del 2007. (Previamente el incremento había sido constante desde el 16,5% en 1980, aunque hoy estas cifras nos hagan sonreír).
En consecuencia está claro como se financió el ‘España va bien’: total y absolutamente con deuda privada.
Llegados al 2007 las cosas empezaron a pintar mal para la economía española. El ladrillo, que generaba el 11% del PIB, prácticamente se detuvo. Eso tuvo un impacto decisivo sobre el empleo, sobre el desempleo, más bien, tal y como recoge el cuadro siguiente. Y aquí las previsiones del ejecutivo si que se mostraron mucho más ajustadas.
Tasa de desempleo (En porcentaje de la población activa).
(*) 2º trimestre: Mínimo histórico en desempleo tras 1975: 7,95%. (**) Celestino Corbacho, Ministro de Trabajo.